lunes, 22 de abril de 2013

El milagro del oso de Wolf Erlbruch: un libro álbum para niños y también para adultos

Portada del libro de la Editorial Lóguez 

Observaciones preliminares

a)    ¿Cómo selecciono un libro para niños?, los aspectos teóricos
            Mi formación inicial como docente se dio en Uruguay desde 1966 a  1970 con los cuatro años de magisterio que estudié en mi ciudad natal, donde mis clases de Literatura Infantil las realicé con una alumna directa de Jesualdo Sosa. Fue él, además, el miembro principal en el tribunal que me tomó el examen en esa materia. Aún el Instituto de Magisterio no estaba oficializado y sólo podíamos graduarnos con un tribunal que estaba integrado por un miembro que venía desde la Capital. Me formé en esos mismos años iniciales, entre tanto, como docente en Literatura General con una profesora titular. Mi ingreso posterior, que se dio por razones nunca previstas por mí, al Instituto de Profesores Artigas de Montevideo donde cursé desde 1972 y donde me gradué en 1977 como Docente en Literatura me fueron encaminando a una alternativa que, al inicio, no vislumbré: la de un promotor de cuentos para niños como narrador oral de cuentos y poemas.
            Por ello, afirmo con tanta propiedad en mi texto publicado en Analítica: 
            Tenemos que aprender a visitar los cuentos. Acudir a ellos con todos los sentidos, con todos los sentimientos, con todos los conceptos. Abiertos: dispuestos a ser para, desde y con ellos.  Como quien entra a la casa de un amigo, a la casa de la persona a la cual admira, a un templo. Queriéndolo sin decirlo, abrazándolo sin tocarlo. Celebrando con él la voz humana. Porque, como asevera Eduardo Galeano:...”Todos, toditos, tenemos algo que decir a los demás, alguna cosa que merece ser por los demás celebrada o perdonada” ¡Y los cuentos nos dicen, los autores de los mismos – conocidos o no- nos dicen, nosotros decimos y quienes coparticipan con nosotros, en el acto artístico de la palabra que se dice, también! (Quintero, 2002)
            Por supuesto mi oficio profesional como narrador oral, me ha llevado a informarme y formarme en todos los aspectos teórico-prácticos que tengan que ver con él y con todos sus entornos y, hasta con cierto humor diríamos, sus contornos. Incluso a estudiar en diversos talleres de lectura y escritura y culminar, recientemente, el Diplomado de Literatura Infantil para Docentes de la Dirección de Cultura de la UDO. Por esos estudios sé, entre otros, de los tips para evaluar y seleccionar libros para niños y jóvenes recomendados por el Banco del Libro.
            Me interesan los libros por sus contenidos, intenciones e ilustraciones. Me interesan porque me estimulen a recrearme, a divertirme, a realizar una “lectura estética”. Sé que ningún texto es inocente, que todo texto me deja una enseñanza y hasta me presenta uno o varios valores. Pero, no por ello, me interesan aquellos libros o autores donde el didactismo y la moralización priven sobre lo estético. Poco me agradan los libros “de acuerdo a su uso”, esos “libros juguete, libros juego o libros de actividades o instruccionales” (Banco del Libro). Sin embargo, para el caso tengo una excepción, ella siempre existe: Un punto rojo de David A. Carter. Un libro tan sugerente que permite inventarte cuentos como los que hemos creado con Beatriz Montero y los pueden escuchar en Youtube o leer en mi blog (Quintero, 2012). También, confirmo, los libros para niños me agradan por la calidad de su edición, expresadas por las texturas, el gramado de sus hojas, la calidad de sus colores, sus troquelados y hasta por el olor que despiden. Y esto ha sido así desde mi infancia, desde mis lecturas en la casa del abuelo y en las bibliotecas escolares de mi ciudad natal. Aún sin conocer lo que conocí al iniciar mis estudios como docente y, menos, lo que conozco desde este Diplomado y el ya citado más arriba.

b)   Los motivos de esta elección
            Sé, por eso no dudé en elegirlo, de la calidad de los textos de la editorial que publicó este libro álbum en español. Como, por supuesto, conozco varios de los libros de Wolf Erlbruch, reconocido como un valioso autor e ilustrador de libros para niños. Premio Andersen 2006, como ilustrador.
            Es el autor de libros como El águila que no quería volar, El topo que quería saber quién se había hecho aquello en su cabeza, La gran pregunta, Leonardo, La Señora Meier y el mirlo. Y, de esa maravillosa obra que es Duck, Death and the Tulip (El pato, la Muerte y el Tulipán) más conocida en español por la cuidadosa versión de la editora Barbara Fiore con el nombre de El pato y la muerte.

c)    El texto y su contenido
            Una historia muy sencilla, tierna, de un humor sutil que le brinda a los padres la posibilidad de «matar a la cigüeña» (Cuaderno de notas…) con una explicación simple para los hijos pequeños de cómo nacemos.
            Al despertar de su letargo invernal y luego de alimentarse muy bien, un oso piensa “en el gran, fuerte padre oso que él podría ser” (Erlbruch, 2002). Al no saber qué habría que hacer para conseguirlo le preguntan a diversos animales: una liebre, una urraca, un salmón, una cigüeña. Recibe de cada uno de ellos respuestas inquietantes o novedosas que no logran satisfacer sus deseos. Hasta que, al ver una extraña nube -¿con forma de osa?- que le recordó a la nube maravillosa que le contaba su madre. Y se tropieza con una mujer osa, por supuesto. Es un álbum que tiene la estructura, el estilo y composición de El topo que quería saber quién se había hecho aquello en su cabeza. Y, como muy bien se apunta en Babar.com:
            Igualmente, hay en esta historia fino humorismo y hasta una ironía que, si bien puede que el lector infantil no llegue a alcanzar, sin duda complacerá al adulto (Gutiérrez, 2005)

d)   La ilustración y su relación con el texto
            Como todo álbum, las ilustraciones tienen total relación con el texto, tanto que no priman una sobre el otro, más bien se apoyan y complementan. Tanto que uno completa el texto con la ilustración o viceversa. Además, como se señala en Cuaderno de notas y diccionario de literatura infantil:           
            Las expresivas ilustraciones, narrativas, sintéticas y en colores planos, que ocupan los dos tercios de la doble página y dejan una franja blanca para el texto en un lado, están centradas en mostrarnos la curiosidad y la perplejidad del oso.

Observaciones básicas

a)    Lo observado en el contenido de este libro
            La descripción inicial tiene la suficiente fuerza para entusiasmarme como lector. Está cargada de elementos poéticos y con mucha sutileza nos prepara para el milagro, el desconocimiento inicial y, por supuesto, el reconocimiento de la fertilidad y el amor  con el resurgir de la primavera. Con un vocabulario sencillo, la  trama se desarrolla con coherencia y es muy comprensible. Los acontecimientos se hacen creíbles pese a lo absurdo o inesperado de algunas de las respuestas. El final, con su poder de sugerencia tan poético como el inicio a través del diálogo, sugerido y sugeridor, ofrece su solución y cierra el conflicto.
            Lo dice y no lo dice: El milagro del oso, es el milagro del amor que, “Si tú colaboras un poquito”, fructificará en hijos “para la próxima primavera”. Como propone la osa, antes de que ambos busquen un lugar “blandito”, “entre la alta hierba”. Es decir, un sutil acercamiento de amor en la comodidad y la intimidad.

b)   Lo observado en las ilustraciones de este libro
            A lo ya señalado podemos observar como las pequeñas ilustraciones que, como unas viñetas, acompañan a cada uno de los textos nos realizan unas pequeñas historias complementarias. Por ejemplo, no se trata de un oso europeo. Es evidente que es un oso al menos del norte de los Estados Unidos o de Canadá.         También, como una divertida manera de sorprendernos y en un complemento al texto, muy dentro del estilo de Wolf Erlbruch que siempre rompe algún estereotipo, se justifica la aparición de la cigüeña que está posada, en África, sobre el lomo de un hipopótamo.

Conclusiones
            Un hermoso libro, Premio Alemán de Literatura Infantil, puede ser muy bien disfrutado por los niños. Pero, también, como todo libro álbum, por los padres que serán sus compradores.  Es un libro que enaltece a cualquiera con esos guiños de cierta complicidad, por mucha ternura y algunas notas de humor e ironía. Con un tema que aún sigue siendo delicado de tratar lo va diciendo entre líneas. Más, lo sugiere. Tanto como para se afirme lo que leemos al finalizar el artículo de Babar:
            El cuento tiene una segunda parte. Pero esa es otra historia y corresponde a los padres contarla al calor de las gratas sensaciones que procura El milagro del oso (Gutiérrez, 2005)
            Comentario de una valoración ética y estética muy acertada.

Bibliografía y páginas webb consultadas

Sobre el cuento:
Erlbruch, Wolf: El milagro del oso. Lóguez Ediciones, Salamanca, España, 2002.
Cuaderno de notas y diccionario de literatura infantil:
En Wikipedia:
Gutiérrez, Diego: El milagro del oso, artículo en la Revista Babar.com, 2005:

Sobre materiales de apoyo:
Carter, David A. Un punto rojo, Combel Editorial, Barcelona, España, 2004.
Banco del Libro, Caracas, Venezuela, TIPS PARA EVALUAR Y SELECCIONAR LIBROS PARA NIÑOS Y JÓVENES
Levín, Clara: ¿Cómo elijo un buen libro para chicos?
Quintero Laplume, Armando: ¿Quieres contar cuentos? 2002
Quintero Laplume, Armando: Nicolás y la lámpara maravillosa, 2013.

Trabajo realizado por Armando Quintero para el Diplomado en Promoción de la Lectura y de la Escritura, Módulo I: Libros y Lectura de la Profesora Jufany Toledo